9 marzo 2023
Usando el Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA), los astrónomos han detectado agua gaseosa en el disco de formación de planetas alrededor de la estrella V883 Orionis, situada a 1.300 años luz de la Tierra. Cuando una nube de gas y polvo colapsa, forma una estrella en su centro. Alrededor de la estrella el material de la nube también forma un disco. En el transcurso de unos pocos millones de años, la materia del disco se agrupa para formar cometas, asteroides y, finalmente, planetas. La composición del agua en el disco de V883 Orionis es muy similar a la de los cometas en nuestro propio Sistema Solar, lo cual es la confirmación de la idea de que el agua en los sistemas planetarios se formó antes que las estrellas, en el espacio interestelar, y ha sido heredada tanto por los cometas como por la Tierra, relativamente sin cambios. Detectar el agua gaseosa es muy complicado; en los planetas el agua está congelada y en las nubes de formación se puede encontrar hacia el centro, cerca de la estrella, donde hace más calor. Sin embargo, estas regiones cercanas están ocultas por el propio disco de polvo. Afortunadamente un estallido dramático de energía en V883 Orionis calentó el disco y elevó su temperatura evaporando el agua en la parte exterior del disco permitiendo detectarla. A partir de las observaciones se encontró que el disco contiene al menos 1.200 veces la cantidad de agua de todos los océanos de la Tierra. Más información en el ESO.