7 diciembre 2015
En solo dos años la apariencia de la estrella CW Leo ha cambiado tanto que se hace necesario abandonar todos los modelos existentes para describirla y se hace necesario cambiar nuestro punto de vista. Situada a 400 años luz, es una gigante roja que está en la fase final del proceso mediante el cual expulsa su atmósfera y se convierte en una nebulosa planetaria. No es visible a simple vista, pero si pudiéramos ver la luz infrarroja seria una de las estrellas más brillantes del cielo. La estrella se ha estudiado durante unos 20 años, pero en los dos últimos ha cambiado tanto su apariencia que los modelos matemáticos que trataban de explicarla mediante cavidades, plumas de gas, discos y halos se han derrumbado por completo. Más información en Royal Astronomical Society.