16 julio 2022
Un micrometeoro dañó el Telescopio Espacial James Webb entre el 22 y el 24 de mayo. En contra de lo esperado al principio el impacto causó mucho más daño de lo esperado y tendrá un efecto duradero en las observaciones del telescopio. Por el contrario, otros impactos de micrometeoros durante los primeros seis meses de funcionamiento del telescopio han tenido un efecto insignificante. La foto muestra imágenes infrarrojas de los espejos del telescopio antes del lanzamiento (izquierda) y después del impacto (derecha). El segmento C3, en la parte inferior derecha, fue el dañado. El segmento C3 tenía un error del frente de onda de 56 nanómetros, similar al de los otros 17 segmentos, pero después del impacto el error del frente de onda ascendió a 258 nm. Los ingenieros del telescopio, cambiando la posición y curvatura del segmento, lo pudieron reducir a 178 nm. Al final, el impacto aumentó el error asociado a todo el espejo a aproximadamente 59 nm. Mientras tanto, la NASA está considerando opciones para evitar más daños, como apuntar la nave espacial en ciertas direcciones para minimizar las posibilidades de impacto; por ejemplo, mirando el espejo en dirección opuesta a la dirección de viaje. Más información en la NASA.