27 abril 2022
Las galaxias enanas se ven afectadas por los mismos procesos evolutivos que tienen lugar en galaxias grandes. Son menos luminosas y menos masivas que sus hermanas mayores, pero son particularmente sensibles a los mecanismos ambientales provocados por la presencia de una galaxia gigante en su vecindad. Para determinar la importancia de estos efectos se pueden comparar las diferencias entre las poblaciones de galaxias enanas: las denominadas "satélites" y las denominadas "aisladas". Ahora se ha observado la galaxia aislada WLM, descubierta en 1909. Es equidistante entre la Vía Láctea y M31, a casi 3 millones de años luz de distancia. Se habría formado en total aislamiento, sin ninguna perturbación exterior, con lo que su masa de materia oscura se considera estable, hasta 90 veces mayor que su materia bariónica. Sin embargo, observaciones lideradas por el Observatorio de París (PSL) revelaron una fuerte interacción entre WLM y el medio intergaláctico. Se han identificado cuatro nubes gaseosas de hidrógeno neutro que se extienden en dirección opuesta a su movimiento en el cielo. Hay dos explicaciones posibles: o el medio interestelar es mucho más denso o la galaxia en realidad está desprovista de materia oscura. Más información en el PSL.