25 marzo 2015
A través de observaciones del Spitzer Space Telescope y de otros instrumentos en tierra, un equipo de astrónomos ha observado una erupción de una estrella que está en los comienzos de su proceso de desarrollo, una estrella naciente. La erupción revela una gran acumulación de gas y de polvo en una estrella muy joven denominada HOPS 383. Una estrella naciente acumula nubes de gas y de polvo en su proceso de formación a causa de la atracción gravitatoria, lo cual produce que la masa central se vuelva más densa y más caliente. Al final de este proceso se transforma en una protoestrella, con un disco central y una atmósfera muy densa, una estrella que se denomina de clase O. Esta erupción es la primera que se ha observado de este tipo de estrellas. La estrella HOPS 383 está integrada en la nebulosa NGC 1977, en la constelación de Orion, en una región de formación de estrellas. Más información en NASA. (Imagen: E. Safron et al.; NASA/JPL/T. Megeath (U-Toledo)).