3 marzo 2015
Un equipo de astrónomos, liderado por Darach Watson, de la Universidad de Copenhague, ha observado una de las galaxias más remotas y más jóvenes jamás encontrada. Es un sistema mucho más evolucionado de lo esperado, ya que tiene una fracción de polvo similar a una galaxia como la Vía Láctea. Este polvo es vital para la vida, ya que ayuda en la formación de planetas. El objeto se llama A1689-zD1. Podemos verlo gracias a que está detrás del cúmulo de galaxias Abell 1689, que amplifica su brillo más de nueve veces. Estamos viendo a A1689-zD1 cuando el Universo tenía sólo unos 700 millones de años. Para medir el polvo se ha utilizado el conjunto ALMA y para medir su distancia se ha hecho con el Very Large Telescope de ESO. Más información en ESO.