11 octubre 2023
Un equipo internacional, con participación del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC), ha analizado datos de veintitrés años del centro de la galaxia M87, que alberga un agujero negro 6.500 millones de veces más masivo que el Sol, del que se obtuvo la primera imagen hace unos años. Los resultados revelan que el chorro que emerge del agujero negro a altísima velocidad oscila hacia arriba y hacia abajo con una amplitud de unos diez grados, lo que a su vez confirma que el agujero negro se halla en rotación. Es la primera evidencia tangible de rotación de un agujero negro supermasivo. El mecanismo de transferencia de energía entre los agujeros negros supermasivos, los discos de acreción y los chorros aún se desconoce. La teoría predominante sugiere que se puede extraer energía de un agujero negro en rotación, permitiendo que parte del material que rodea el agujero negro sea expulsado a gran velocidad. La investigación indica que el eje de rotación del disco de acreción se desalinea con el eje de giro del agujero negro, lo que genera un chorro oscilante, o en precesión. La detección de esta precesión constituye una evidencia inequívoca de que el agujero negro supermasivo de M87 se halla, en efecto, girando. El período de precesión es de alrededor de once años. Más información en el IAA.