27 septiembre 2018
Un equipo de astrónomos del Reino Unido ha realizado la primera detección de materia cayendo dentro de un agujero negro, en la galaxia Seyfert PG22+143, situada a 1.000 millones de años luz. La detección se hizo en rayos X a través de los datos del observatorio XMM-Newton de la ESA. Generalmente el material gira en espiral alrededor del agujero negro calentándose y convirtiendo su energía gravitacional en radiación. En los agujeros negros supermasivos no está claro que dirección pueden tener las órbitas; podrían estar desalineadas con la rotación de agujero negro. Se ha visto que el espectro de rayos X está fuertemente desplazado al rojo, la materia cae al agujero negro a la enorme velocidad del 30% de la velocidad de la luz. En este caso, el gas casi no tiene rotación alrededor del agujero y está a una distancia de solo 20 veces el tamaño del horizonte de eventos de agujero. La observación concuerda con un trabajo que demuestra que los anillos de gas pueden romperse y colisionar entre sí, cancelando su rotación y dejando que el gas caiga directamente hacia el agujero negro. Más información en AAAS.